Experimento en la cocina

FLAO IBICENCO


Hace poco descubrí en el blog Cocinando con catman que Manu y Paula del blog Bontiberi hacían una propuesta mensual entre ellos que llamaban "Muestra de cocina balear".
Como lo que más me gusta de tener este blog es que cada día aprendo cosas nuevas y "experimento" con cocinas que están fuera de mis "fronteras", me puse en contacto con Manu para preguntarle por esa muestra y qué tenía que hacer para participar.
El, que es un encanto, me contó todo lo que tenía que saber de esta propuesta (varias veces por que soy una despistada, gracias Manu por tu paciencia) y me invitó a participar este mes con esta receta y por eso estoy aquí hoy que es el día de publicación.
Nunca había oído hablar de este postre y no sabía que me iba a encontrar cuando abriese el horno. La sorpresa fue grata, ya que me encontré una mezcla entre la quesada y el pastel de arroz bilbaino que me gustó mucho.

Ingredientes:
Para la masa quebrada:
150gr. harina
75 gr. mantequilla
30 gr. azúcar
1 yema de huevo
20 ml. anís
1 cdta. semillas anís (yo no las puse)
1 pizca de sal
Para el relleno:
300 gr. queso fresco (se puede usar requesón)
150 gr. azúcar
3 huevos
100 ml. leche entera tibia
2 cdas. hierbabuena picada
Azúcar glass

Elaboración:
Precalentar el horno a 180º.
Derretir la mantequilla y mezclar con la harina y la sal. Una vez esté bien mezclado, añadir la yema y el anís y amasar hasta formar una masa dura. Hacer una bola, envolverla en film transparente y dejar reposar en la nevera durante al menos 1/2 h.
Mientras haremos el relleno. Triturar bien el queso y mezclar con los huevos y el azúcar.
Cuando sea una pasta homogénea, añadir la leche y la hierbabuena y mezclar bien.
Sacar la masa de la nevera y dejarla templar durante 10 minutos.
Pasado este tiempo extenderla con un rodillo encima de una superficie enharinada y cubrir el molde con ella.
Pinchar el fondo para evitar que suba. Verter encima el relleno que habíamos preparado y hornear entre 30 o 40 minutos o hasta que al pincharla no manche.
Decorar con azúcar glass.

Os he puesto la receta tal y como la encontré en Ondakin que aunque ya no siga publicando recetas, las que tiene merece la pena mirarlas de vez en cuando. Como en casa la única que come dulce soy yo, reduje la receta para hacer estos pastelitos pequeños y no engordar mucho.
Si la queréis probar, tened en cuenta que el sabor del anís y la hierbabuena os tienen que gustar mucho porque o yo me pasé echando, o son los sabores que predominan en este postre. Pero os aseguro que os gustará.
Besos