El viernes es el día de San Blas y aquí es tradición celebrarlo.
Cuenta la leyenda que San Blas curó a un niño de morir atragantado con una espina de pescado, además de otras sanaciones que se le atribuyen, con lo cual está considerado el santo protector de las enfermedades de garganta.
Para que obre su poder todos los años el día 3 de febrero se debe bendecir los cordones de San Blas y llevarlos al cuello durante 9 días, después se deberán quemar.
Este ritual, dice las creencias que te protege de los males de garganta durante todo el año.
Así que todos los años se festeja este día. Se instalan mercados agrícolas en muchos pueblos y cerca de las iglesias se ponen puestos ambulantes de cordones y de rosquillas, que son el producto típico de este día.
Estas rosquillas vienen ensartadas en una rama de laurel y no son blandas como las rosquillas caseras normales, sino todo lo contrario, son un poco duras. Están cubiertas con glasa con sabor a anís.
Así que, aunque yo no soy muy forofa de estas rosquillas, este año he decidido hacer las mías.
La receta la cogí de un blog estupendo que no debéis dejar de visitar, Con sabor a canela.
Ingredientes:
Para las rosquillas:
200 gr. harina
2 huevos
1 cdta azúcar
40 ml aceite oliva
2 cdtas. anís
Para el glaseado:
1 clara de huevo
200 gr. azúcar glas
1 cdta. anís
Elaboración:
Precalentar el horno a 165º.
Primero debemos batir los huevos con el azúcar hasta que blanqueen. Después añadimos el anís y cuando esté bien mezclado, echamos el aceite y batimos un poco más.
Pasamos a un bol e iremos mezclando poco a poco la harina tamizada, terminaremos amasando con las manos hasta que quede una masa lisa y elástica. Si veis que os queda muy pegajosa, id añadiendo poco a poco más harina hasta que no se os pegue a las manos.
Entonces cogemos trocitos de masa, los estiramos y les damos forma de rosquilla. Los pondremos en una bandeja de horno con papel sulfurizado y los meteremos al horno durante 15 o 20 minutos.
Dejamos enfriar y reservamos.
Ahora hacemos la glasa batiendo con varilla la clara de huevo hasta que comience a espumar. Entonces le añadiremos el azúcar tamizada poco a poco, sin dejar de batir hasta que obtengamos una pasta parecida a la pasta de dientes.
Añadimos el anís y bañamos con esta glasa las rosquillas por un lado. Dejar secar hasta que la glasa se endurezca.
Tened cuidado de no añadirle mucho anís a la glasa porque se os quedará un poco transparente como me pasó a mí. Debería ser más blanca.
Os dejo unas fotos de uno de los puestos típicos de San Blas vendiendo cordones y rosquillas.
Feliz San Blas.
Besos
Por San Blas, las cigüeñas verás, no???
ResponderEliminarDeliciosas las rosquillas.
Besos.
Gràcies per donar-nos a conèixer aquesta tradició de San Blas. I gràcies a la Rosaleda per la dita popular Por San Blas, las cigueñas verás". jo diria... "Nunca te acostarás sin saber una cosa más" Petons
ResponderEliminara mi me gustan mucho esas rosquillas, con ese gustito a anis. Y mira que es raro porque el olor del anis me resulta muy desagradable, y sin embargo en este dulce me gusta.
ResponderEliminarbsts. maite
Bonitas tradiciones y fantásticas rosquillas!!
ResponderEliminarBesos
Sandra
No tenía ni idea de esta tradición!! me mandas un par de cordones y unas cuantas rosquillas? jijiji. Besitos guapa
ResponderEliminarNo tenía ni idea que el viernes era San Blas!! jaja Me ha encantado tu blog (qué monada las galletas de San Valentín, por favor!!), así que me he hecho seguidora :)
ResponderEliminarUn beso, me iré pasando!! :D
no las conocia pero se ven riquisimas con esa glasita!
ResponderEliminarsaludos.
Yo no las conocía pero tiene que estar muy ricas y con esa glasa te han quedado estupendas besos
ResponderEliminarUna receta riquísima! Me la apunto ahora mismo.
ResponderEliminarBesos
Que pinta. Aqui se toman por San Anton unos muy parecidos pero sin glaseado. EStos tienen una pinta espectacular
ResponderEliminarUn beso
me encantan estas rosquillas, besos
ResponderEliminarComo se hace por aquí,!!! Con la rama y todo, que delicia...
ResponderEliminarNo conocía la historia de San Blas ni las rosquillas... que tienen una pinta... Me han encantado! Besos
ResponderEliminarNo las conocía, pero seguro que me encantarían!!! La foto es preciosa. Besos
ResponderEliminarEsta receta te la copiaré seguro porque todo lo que sean roscos, rollos o rosquillas me encantan. Un besito.
ResponderEliminarcosicasdulces.blogspot.com
Que ricas se ven!....no las conozco pero me encantaria probarlas.....y por supuesto....ir a recorrer esos puestos tipicos!!.....Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarSe ven muy ricas...
ResponderEliminarKiss!!
aaaaah, ya entiendo de dónde viene esa manía de decír "san blas, san blas" cuando alguien está tociendo.
ResponderEliminarMe encantó la glasa anisada. :)
¡Besos!
Cuantísimo tiempo hace que no preparo rosquillas... Ya ni me acuerdo. Y ese glaseado mmmmmmmmmmmmmmm maravilloso y muy tentador.
ResponderEliminarBesos.
OH Ana!!!, yo tampoco soy muy forofa de las rosquillas, pero por la entrada tan bonita con su explicación, la foto de ellas vestiditas de laurel..ahora mismo me las colgaria todas al cuello con todos los cordones que me mandasen!!:)
ResponderEliminarlinda entrada cariño!!!!
besitos de Juana!
Jo Ana estas rosquillas le encantan a mi madre, igual si se las preparo le doy una sorpresa, aunque será difícil repetir esta maravillosa presentación tuya.... bueno yo se las hago si se me rompen o no salen tan bonitas nos las comemos a miguitas.
ResponderEliminarBesos guapa.
Hola!
ResponderEliminarLa fiesta de casa de mis tíos es este fin de semana, celebran cada año el San Blas.
Muchas gracias por compartir esta receta de roquillas, y las fotos de los puestos, me encantan!
Un saludo!
natalia.
Seguro que están muy ricas, por aquí no hay tradición de hacer rosquillas en esta fecha.
ResponderEliminarBesos.
Pues si lo sé me compro los cordones, estoy afónica, yo y mi garganta.
ResponderEliminarDe momento me llevo una rosquilla, me encantan.
Besos.
Que ricas se ven!, me encanta que sean horneadas.
ResponderEliminarUn beso.
No conocía estas rosquillas, y mucho menos su historia! qué ganas de probar una..
ResponderEliminarBesos y feliz finde!
muy ricas, no conocia la leyenda. Un beso.
ResponderEliminarANA ..si también aqui al lado de donde vivo se festeja SAN BLAS con una romeria que es increible ..mi post de los esparragos está dedicado al dia de SAN BLAS y las fotos de como se festeja aqui .Lo tradicional es tomar un buen cocido y unas concas de vino .....no sabia lo de las rosquillas , que desde luego me las apunto .besos buen domingo MARIMI
ResponderEliminarQué buena pinta tienen estas rosquillas, quiero una para merendar. Me encanta leer sobre las tradiciones de cada lugar.
ResponderEliminarBesos
Me encantan las roscas de San Blas!! La verdad es que es la primera vez que las veo con glaseado y me han encantado. Un beso :)
ResponderEliminarNo te diré nada de lo de la cigüeña... porque me quedo mirando esas rosquillas maravillosas!!!!
ResponderEliminartienen una pinta estupenda. Que ricos. Bss
ResponderEliminarMe encanta el puntito de anís de estas rosquillas!
ResponderEliminarEstán de vicio!!!!
Saludos!
Anna
Me encantan pero no las había visto glaseadas y para añadir refranero ... Para San Blas la cigüeña verás. Donde vivo tenemos 4 parejas que esta invierno tan raro ni se han ido pero eso es lo que dicen.
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